María de la Cruz, de 34 años, madre soltera de una niña de 6 años llamada Yahaira, había cobrado su quincena y salió de su trabajo a las 4 de la tarde y llegando al colmado a pagar lo que le debía fue interceptada por dos jóvenes en un motor, quienes con mucha violencia le arrancaron la cartera y en el forcejeo María cayó y se golpeó con una piedra en la cabeza que aún la mantiene inconsciente.

Como es evidente en ese instante ese asalto cambió la vida de María y la de su hija Yahaira.

Es por eso que en los actos de violencia y de delincuencia, más allá del hecho en sí, hay que valorar que son generadores de múltiples consecuencias que marcan para siempre la vida de las personas.

En un caso como este, aparentemente simple, que ustedes saben que sucede de similar o peor manera diariamente y de muchas formas en todo el territorio nacional está reflejado el trasfondo de la inseguridad ciudadana y la violencia en la República Dominicana. De eso se trata este Seminario.

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Muy buenos días señor Rector de la Universidad del Caribe, maestro José Alejandro Aybar Martín, a los miembros de la mesa de honor, a los señores expositores presentes, a las demás autoridades de Unicaribe.

Muy buenos días amigas y amigos todos, que nos honran con su presencia..

Gracias a todos y todas por acompañarnos en el abordaje de un tema de tanta preocupación en nuestro país, como es la inseguridad y la violencia de la estamos siendo víctimas, para explorar las causas generadoras reales por las que esta realidad se ha instaurado y desarrollado en la República Dominicana, y sobre todo, para indagar las alternativas de solución eficaces, para detenerla y revertirla.

Es un hecho establecido que en nuestro país vivimos un proceso de incremento de los niveles de violencia y de inseguridad ciudadana. Solo hay que encender la radio, ver la televisión, acceder a las redes sociales y sobre todo, oír a nuestros compañeros de trabajo, amigas, vecinos y familiares narrando los distintos episodios delincuenciales de que han sido víctimas. Incluso, no hay una sola encuesta de la última década en nuestro país, que no haya identificado que entre las primeras preocupaciones de los dominicanos se encuentran, la inseguridad ciudadana y la violencia. Por eso, asumiendo la inseguridad ciudadana y la violencia como un hecho cierto y constatado, este Seminario se concentrará en explorar cuáles son las causas que generan e incrementan los niveles de violencia e inseguridad en nuestro país; en examinar cuáles son las respuestas institucionales que se les da; Porqué esas respuestas no han sido exitosas? y además, plantear estrategias certeras para enfrentar este terrible fenómeno que nos azota.

Estamos conscientes de la trascendencia que tiene que podamos encontrar respuestas para enfrentar la inseguridad y la violencia. Sabemos que no es suficiente tan solo definirlas, sino que el gran reto que tenemos es que los órganos responsables de enfrentar estos flagelos, conviertan las propuestas en políticas públicas y que desde el Estado se dispongan los recursos para su ejecución.

Haremos un ejercicio científico sobre las causas y las soluciones, no con un objetivo de regustear el intelecto, sino de que puedan ser útiles y oportunas en la búsqueda de soluciones, porque en definitiva, a lo que aspiramos es a vivir en una sociedad segura y sin violencia.

Son muchas las preguntas que tenemos que hacernos para hurgar en las causas y poder plantear soluciones.

Quiénes son los más obligados a ofrecer soluciones a este problema tan serio que tenemos en la República Dominicana? Somos nosotros cada uno de los ciudadanos e instituciones privadas o es el Estado Dominicano?  

Está el gobierno dominicano haciendo lo que debe hacer?. Está dedicando los recursos del presupuesto nacional necesarios para enfrentar la inseguridad y la violencia? Están los órganos especializados del Estado dominicano cumpliendo un plan certero de seguridad para el país?  Se están invirtiendo los recursos necesarios para tener la Policía Nacional que necesitamos?  Se está respetando el rol del Ministerio Público en la ejecución de la política del Estado de lucha contra la criminalidad?  Se están atacando preventivamente las causas económicas y sociales generadoras del delito y de la violencia?  Está funcionando nuestro sistema carcelario como centro de regeneración de los condenados?  Se está trabajando con los hogares dominicanos, así como también en las escuelas para fomentar una sociedad libre de machismo y además, dándosele ejemplos y competencias a los jóvenes para aprender a solucionar los problemas de manera pacífica?  Están nuestras autoridades en general, brindando ejemplo de  transparencia y respeto a la ley, de manera que contribuyan con la creación de un clima de convivencia pacífica, democrática y de justicia?  Están jugando su papel los medios de comunicación, de orientar a la ciudadanía y fomentar una cultura de paz? Respetan las autoridades, el Estado de derecho, haciendo no tan solo respetar la ley, sino sometiéndose a ella? Hay la suficiente conciencia de que el irrespeto al Estado de Derecho y los abusos y atropellos de autoridades se convierten a su vez, en una fuente permanente de inseguridad ciudadana? No hay que olvidar que en las sociedades donde funciona realmente el Estado de derecho la mayor fuente de confianza y de seguridad de la ciudadanía es saber que las autoridades están sometidas al respeto de la ley, siendo ésta la línea de separación entre delincuencia y autoridades.

Qué visión está predominando en la lucha contra la inseguridad ciudadana y la violencia, el de la represión ante el hecho consumado o el de la prevención para evitar la comisión del delito o acto de violencia?

Todas estas y muchas otras interrogantes serán respondidas en el día de hoy con las enjundiosas exposiciones de profesionales muy autorizados para hablar de estos temas, por su altas capacidades, experiencias y compromiso. De antemano agradecemos su participación entusiasta, a los muy distinguidos señores Lilian Bobea, Susi Pola, Daniel Pou, Servio Tulio Castaños, Fray Arístides Jiménez Richardson, Roxanna Reyes, Desiree del Rosario, Tahira Vargas, Pablo Mella y Orlidy Inoa.

Damos las gracias también, a las instituciones que han dicho presente en este seminario, como son la Escuela Nacional del Ministerio Público, el Colegio de Abogados de la República Dominicana, la Defensoría del Pueblo, la Policía Nacional, Participación Ciudadana, Fundación Institucionalidad y Justicia (Fiinjus), Centro Juan Montalvo, a las autoridades académicas y administrativas y estudiantes de Unicaribe, a la Prensa, y a cada uno de Uds. que nos honra con su presencia y participación.

Asimismo aprovechamos para dar las gracias a varias instituciones que han contribuido con este Seminario: El Banco Popular Dominicano, Listín Diario, Hoy y el periódico digital Acento.

Señoras y señores, El Centro de Análisis y de Estudios Internacionales (CAYEI-UNICARIBE)  que les ha convocado hoy y que tengo el gran honor de dirigir es una entidad de la Universidad del Caribe, que tiene por finalidad generar pensamiento, analizar la realidad dominicana y estudiar la problemática internacional, desde una perspectiva plural y transdisciplinaria.

Este Seminario por tanto, sobre las causas y alternativas de solución a la violencia y la inseguridad ciudadana en la República Dominicana, se inscribe dentro de las actividades que estaremos realizando para el logro de nuestra misión como centro de pensamiento que no es otro que el de promover encuentros científicos y académicos, de diálogo y de debates, así como también posicionarse como espacio de reflexión e investigación y producir conocimiento y propuestas que orienten la toma de decisiones en el ámbito público y privado.

Les reitero la bienvenida.

Que esta jornada les sea muy provechosa.

Declaro iniciados los trabajos del Seminario.

Muchas gracias.